Al cerrarse las compuertas del proyecto hidroeléctrico de Barro Blanco el gobierno y la empresa GENISA, garantizaron que el agua solo alcanzaría una altura de 103 MSNM, donde solo alguna viviendas quedarían bajo ese nivel.
La semana pasada tras el fenómeno de la depresión tropical en el caribe el embalse del proyecto hidroeléctrico de Barro Blanco creció afectando nuevas viviendas que se encontraban a 20 metros de la orilla del embalse.



La comunidad de Kiad advirtió años anteriores que estos eventos extremos podrían ocurrir y poner en riesgo la seguridad de los pobladores de este sector.
Tantos las Naciones Naciones Unidas, el Gobierno Nacional y los Bancos Europeos (FMO, KWF y BCIE) vieron con buenos la conclusión de este conflicto lo que ha sido una gran irresponsabilidad porque hasta la fecha no han reparados los daños que causaron con el cierre de las compuertas.
Recordemos que con el cierre de las compuertas se registraron daños a todos los medios de vida de las comunidad indígena ngäbe como fueros sus vías de acceso, cultivos, zonas de recreación y sitios ceremoniales sagrados.